Prosigo en esta entrada con las novelas que recomiendo leer de la saga de la Fundación, una de las más relevantes de toda la historia de la ciencia-ficción. Es el turno de "Fundación e imperio", segunda novela por orden cronológico, aunque cuarta argumentalmente hablando. Si recuerdan, en mi anterior entrada ("Fundación"), avisaba de los efectos negativos que en la novela causaba su carácter de fix-up de cinco relatos cortos. Pues bien, el mismo argumento pero en sentido inverso basta a mi modo de ver para que la impresión global de "Fundación e imperio" sea muy superior a la de "Fundación": sólo consta de dos historias.
En efecto, la presente novela la constituyen "El general", que relata en algo menos de 80 páginas el enfrentamiento entre la Fundación y el último gran general del todavía poderoso Imperio Galáctico, y "El mulo", una historia mucho más extensa (casi 150 páginas) sobre un mutante de poderes paranormales que logra crear un imperio con los reinos que bordean la Fundación e inicia una guerra contra la misma. Estas dos únicas historias le permiten a Asimov presentar una narración completa y pensada en su conjunto, con unos personajes fijos y un hilo argumental coherente. Por lo cual se puede profundizar un poco más en las circunstancias, los hechos no se suceden tan vertiginosamente como en la novela anterior, y el lector tiene tiempo de adaptarse a los cambios. Además, en esta novela Asimov da un giro argumental magistral (y no inmediatamente perceptible) al cancelar la hasta entonces innegable sensación de "éxito asegurado" que las predicciones de la psicohistoria y los actos derivados de la misma habían tenido. En otras palabras, el aparentemente perfecto plan de Hari Seldon resulta ser en "Fundación e imperio" falible, lo que enriquece sin duda la trama.
No obstante lo anterior, la primera parte tiene cierto regusto a "cuento", en el sentido mas liviano del término: el desarrollo sigue siendo mucho más esquemático que en las dos primeras novelas de la saga, y los personajes no están tan bien caracterizados como en ellas. Es un relato bien planteado, pero hay detalles como la propia resolución que dan la sensación de estar un poco improvisados. En cambio, el segundo relato, probablemente a causa de su mayor longitud, aporta una mayor riqueza argumental y una mejor caracterización de los personajes. Estas son las dos razones principales por las que, poco a poco, el interés del lector va aumentando, al tiempo que el desmoronamiento gradual de la Fundación le hace plantearse qué tiene en mente Asimov para reflotar su historia. Preguntas que se ven fantásticamente respondidas por Asimov en el deselance: ese elemento de misterio, tan habitual a la vez que tan bien guardado por el Buen Doctor, que se conjuga a la perfección con los ingredientes habituales de la space opera para terminar la lectura con una sensación inmediata de haber leído un clásico.
Es cierto que el estilo literario que emplea Asimov en esat novela, principalmente basado en amenas pero largas conversaciones, es ameno pero carece de la calidad literaria que sí reflejan las novelas con las que completó la saga en su última década de vida (piénsese en su defensa que cuando terminó la segunda historia de esta novela tan sólo tenía 25 años). O que a pesar de basarse en unos pilares razonablemente sólidos desde el punto de vista científico (con la formidable psicohistoria a la cabeza) no hay asomo de ordenadores u otros elementos informáticos. Incluso es cuestionable el recurso a los poderes psíquicos que plantea en "El mulo" (y a los cuales seguiría recurriendo para escribir "Segunda Fundación"), si bien estoy convencido de que tales avances serían indudablemente plausibles si la humanidad llegara a durar tanto tiempo como supone Asimov en su creación. Pero no debemos olvidar que cuando estos relatos se publicaron el hábitat natural del género aún eran las revistas pulp, y que por tanto el género apenas había empezado a hacer hueco para la novela, por lo que esos defectos pierden fuerza frente a una trama que sigue siendo original, fresca, sólida, amena y excelentemente resuelta.
Les espero en la revisión de la siguiente novela de la saga.
Un apasionado de la literatura de ciencia-ficción y escritor a tiempo parcial que dedica parte de sus escasos ratos libres a compartir su pasión con el resto de aficionados.
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Coincido con su valoración del libro, el cuál acabo de terminar de leer. La primera parte, la de El General, es entretenida, pero no, quizá, especialmente significativa. En el fondo es bastante continuación de lo anterior, y el final, al enterarnos por medio de un titular que leen los tripulantes, resulta un tanto distante. Sin embargo el relato de El Mulo destaca bastante más. Creo que gana enteros al presentar un nuevo planteamiento que pone en debate la regularidad de los éxitos de la Fundación, y atrapa al lector para el resto de la saga, al desvelar que el punto verdaderamente interesante es esa otra Fundación. Al menos, con esas ganas me he quedado.
ResponderEliminarEnhorabuena por el blog. Aunque siempre he ido leyendo algún que otro título de Ciencia Ficción nunca me he acercado lo suficiente a estos grandes clásicos, y de un tiempo a esta parte estoy descubriéndolos. Sus reseñas me sirven de orientación en tan extraordinario ramal de la literatura. Un saludo, RJ